Se sabe que la familia del empresario tenía miedo que la conejita no fuera un apoyo para él al final de su vida, sin embargo quedaron sorprendidos gratamente al ver el cuidado que tuvo con Hef, como le decían de cariño, en sus últimos días.
Crystal decidió romper el silencio con estas palabras que mandó a la revista People: “No me ha sido posible escribir a la mayoría de las personas para agradecer sus condolencias. Tengo el corazón roto. Aún no lo creo. Lo dejamos descansar el domingo. Está en el lugar en el que siempre quiso pasar la eternidad. Él era un héroe americano. Un pionero. Un alma amable y humilde que abrió su vida y su casa al mundo, siento lo mucho que me amó. Yo lo amaba mucho. Estoy muy agradecida. Me dio vida. Me dio dirección. Me enseñó amabilidad. Estaré eternamente agradecida de haber estado a su lado, tomando su mano y diciéndole lo mucho que lo amaba. Me cambió la vida, me salvó. Me hizo sentir amada cada día. Era una luz en el mundo, una fuerza como ninguna otra. Nunca ha habido y nunca habrá otro Hugh M. Hefner”.
Hugh Hefner y Crystal Harris en 2013. (Foto: Getty Images)
Es ahora que Daily Mail ha informado que, a pesar de que se dijo que la viuda no era parte del testamento de Hugh y que había firmado un contrato prenupcial cuando se casaron en 2012, todo indica que, de sus más de 43 millones de dólares, el empresario le ha dejado 12 millones, de los cuales 5 son en “efectivo” y 7 son el valor de una casa de cuatro recámaras que compró en Los Ángeles en 2013. El resto de la herencia de Hefner será repartida entre sus cuatro hijos, la Universidad del Sur de California y algunas caridades.
Por lo pronto, los restos del fundador de Playboy ya descansan junto a los de Marylin Monroe, como él mismo decidió muchos años atrás.
0 comentarios:
Publicar un comentario